
Reposicionar los músculos y extraer el exceso de piel de la cara y cuello que con el paso del tiempo se han deslizado hacia abajo.
¿Qué es la Cirugía de Estiramiento Facial?
La Ritidectomía o estiramiento facial, es una cirugía plástica estética muy frecuente utilizada para reposicionar los músculos y extraer el exceso de piel de la cara y cuello, ya que con el paso del tiempo van deslizándose hacia abajo y forman papada, arrugas en la mejilla, surcos nasogenianos (línea de expresión que va de la nariz a la comisura de la boca) y de “marioneta” (de la comisura de la boca al mentón).
Beneficios del Estiramiento Facial
Los resultados de la Ritidectomía dan un aspecto juvenil y descansado, son mucho más notorios que los tratamientos no quirúrgicos, la ritidectomía es para casos severos que no se solucionan con relleno facial y/o la toxina botulínica. Sin embargo, pueden ser complementarios de esta cirugía.
¿Cómo es la cirugía?
Se realizan incisiones sobre la patilla, por delante y por dentro de la oreja, rodeando al lóbulo y en el surco por detrás de la oreja. Se despega la piel, se reacomodan los músculos, se retira el exceso de piel y se cierran las incisiones. Cuando la cirugía ha terminado, se coloca un vendaje o prenda postoperatoria alrededor del rostro y cuello para reducir la hinchazón y los moretones, en algunos casos se coloca un drenaje pequeño para evitar acumulación de líquido.
Recuperación y resultados
El estiramiento facial generalmente se realiza con una noche de hospitalización; durante la recuperación hay edema y a veces equimosis (moretones). Se dejan dos pequeños drenajes que se retiran al día siguiente de la cirugía y los puntos una semana después; La hinchazón disminuye gradualmente en un lapso de 4 a 6 semanas llegando al resultado definitivo a los 6 meses. Te recordamos que el cuidado y la atención en las indicaciones médicas permiten una recuperación más rápida.